El mejor plan
Los mejores recuerdos no se guardan en fotos, se viven
Semana Santa. Unos días para parar.
El descanso también forma parte de vivir, y a veces es necesario que lo recordemos. Estos días de Semana Santa he aprovechado para hacer una pequeña escapada y disfrutar de un destino precioso: La Rioja. Una experiencia que ha sido tan bonita como especial. Resumida en 10 segundos: nos alojamos en un hotel bodega rodeado de viñedos, recorrimos pueblos con encanto: Laguardia, Cenicero, Haro, Navarrete… y, por supuesto, hicimos parada obligatoria en la famosa Calle Laurel de Logroño. Si tienes oportunidad, es una escapada que te recomiendo con los ojos cerrados.
Cuatro reflexiones tras unos días de descanso
Hoy no tengo mucho tiempo para escribir, así que te comparto simplemente cuatro reflexiones breves después de estos días de descanso, por si también te resuenan.
1.
Tu tiempo es un regalo
y compartirlo con las personas correctas cambia tu vida.
Seguro que lo conoces -hablo muchas veces de él- el estudio de Harvard, conocido como el Estudio de Desarrollo Adulto, que lleva más de 80 años analizando cuáles son los factores que hacen que una vida sea plena. La conclusión es clara: no son los logros ni las riquezas, sino la calidad de nuestras relaciones lo que más influye en nuestra felicidad y salud a largo plazo. Estar conectados emocionalmente con los demás mejora nuestro bienestar físico, reduce el estrés y alarga nuestra esperanza de vida.
Cuando eliges con quién pasas tu tiempo, en realidad estás eligiendo cómo quieres sentirte en tu día a día y cómo quieres que sea tu vida. Pocas decisiones tienen un impacto tan profundo.
2.
Ríe todos los días
La importancia de reírse… No siempre recuerdas el motivo exacto, pero cuando te ríes, después recuerdas la sensación.
Yo necesito un rato de risas todos los días. Quién me conoce, lo sabe. Reírse es algo sencillo pero poderoso: las personas que te hacen reír son medicina. Compartir momentos de risa con alguien crea un vínculo invisible, pero muy poderoso. Es como si tu cuerpo reconociera que ahí, con esa persona, puedes bajar la guardia y simplemente disfrutar.
Reír no solo fortalece las relaciones, también mejora la salud. Según un estudio publicado en The American Journal of the Medical Sciences (Bennett et al., 2003), la risa tiene efectos positivos en el sistema cardiovascular, reduce los niveles de cortisol (la hormona del estrés) y mejora la función inmune. Además, cuando reímos liberamos endorfinas, lo que nos genera una sensación inmediata de bienestar. Así que, más allá de lo emocional, reír también nos protege.
3.
Quédate con quien te suma
Rodéate de quienes hacen que el tiempo vuele y te sientas bien.
Es una recomendación personal: cuida tu entorno emocional. Si una persona te hace sentir a gusto, que te escucha y que eres tú, no la sueltes. Rodéate de quién te suma.
4.
El mejor plan
No importa el lugar, el mejor plan está con las personas adecuadas.
A veces creemos que para desconectar necesitamos un destino paradisíaco o una agenda repleta de actividades.
Pero en realidad, el mejor plan suele ser ese que se construye con naturalidad, con alguien que te hace sentir en casa, estés donde estés.
Cualquier lugar puede ser precioso, sí. Pero lo que lo hace especial siempre es cómo lo vives: las conversaciones, los silencios, los brindis improvisados, el humor en medio de una ruta inesperada… eso es lo que convierte un plan en inolvidable.
El mejor lugar del mundo
El mejor lugar del mundo no es un sitio, sino que está al lado de quién te hace feliz.
Y esa es una verdad que a veces olvidamos. Por eso te animo hoy a parar un momento y pensar: ¿con quién te apetece compartir tu tiempo? ¿A quién no le dices lo suficiente lo importante que es en tu vida?
Hazlo. Escríbele un whatsapp. Llámale. Porque al final, ahí está el mejor plan.
Hoy te regalo la canción que más ha sonado estos días en nuestro viaje, una canción preciosa para darte las gracias por leerme y desearte una semana genial
Te juro que no hay un segundo que no piense en ti
El amor es así, lo quiero decir
llevaba una vida esperándote aquí
y ahora tan cerca y comiéndote a versos
dame la mano y confía en mí …
es imposible, no me lo creo
es el momento, toca vivir
enséñame a querer
enséñame a creer
te juro que no hay un segundo que no piense en ti
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