Un nuevo principio …

para lograr lo que deseas

 

 

El mes de septiembre siempre trae cosas bonitas. Ya sabes que es mi mes favorito, ¿por qué será?

Semana muy completa, que empezó con mi cumpleaños -mil gracias por las felicitaciones – que se acuerden de ti, te llamen, te escriban o te dediquen un mensaje es una de las sensaciones más maravillosas del mundo-, que ha seguido con el inicio de un nuevo curso, que ha traído de vuelta mi programa formativo para mujeres y que me tiene ilusionada con todo lo que está por venir.

Es momento de comienzos. Nuevo curso, nuevos proyectos, nuevos inicios …

A veces tienes un plan que se quedó pendiente en un momento determinado. Un plan que ibas a hacer, estaba planificado, pero algo lo paró … Y cuando ese ‘algo’ desaparece, es como si volvieras atrás en el tiempo y te situaras de nuevo en el punto de partida. Las cosas se pueden detener un tiempo, pero al final, les llega su momento. No soy impaciente.

Y ha llegado el momento de activar nuevos inicios. Septiembre es el momento ideal.

Esta semana han llegado a mí dos palabras que no conocía, que me han hecho pensar y que quiero compartir contigo.

La primera ha sido “maktub”, que significa que lo que está destinado a suceder siempre encontrará una forma única, mágica y maravillosa de manifestarse.

 

 

Se ha convertido en uno de los tatuajes de moda. Probablemente porque nada sucede por casualidad, todo sigue un plan, aunque a primera vista no seamos conscientes de ello. Una de mis citas preferidas de Ruiz Zafón es justamente esta:

La segunda, ha sido “late bloomers”.

 

Late bloomers

No conocía el concepto de “late bloomers”. Lo descubrí a través de un artículo de Marita Alonso que te recomiendo: “Es un error creer que hay que lograrlo todo a la primera”: el arte de conseguir las cosas tarde.

Un late bloomer, traducido en el artículo por “tardío”, es una persona que florece más tarde en la vida, que encuentra su motivación y descubre todo su potencial en un momento de madurez de su vida.

Me encantó ese concepto

El artículo habla de la serie “Sólo asesinatos en el edificio”, señalando que la serie es un homenaje a los late bloomers, “es un sentido homenaje a aquellos que han esperado hasta la madurez para lograr lo que deseaban”. Me quedo con las ganas de ver la serie.

 

 

Transcribo un párrafo del artículo que ha resonado especialmente en mi:

Raquel López, que ha publicado este año el libro Guía de gestión emocional (2023), cree que el concepto ‘late bloomers’ en sí mismo es “revolucionario” a la par que contradictorio. “Es una revolución que las personas no se limiten a seguir lo esperado por su edad y se permitan experimentar, fallar y también encontrarse a sí mismas o su vocación a una edad más tardía de lo socialmente esperable, y sobre todo, que no tengan miedo a ir a por ello y buscar sus oportunidades de lograrlo. Por otra parte, no puedo evitar pensar que es lo normal. El error consiste en creer que la forma correcta es lograrlo todo a la primera, tener 18 años, saber a qué te quieres dedicar el resto de tu vida y conseguirlo al momento. Veo a mucha gente en consulta que se supone que lo ha logrado, que tiene el trabajo de sus sueños y éxito y, sin embargo, no es feliz. Pero se han metido tan al fondo en esa vida que no saben salir de ella o mirar fuera”. ¡Minipunto para los tardíos!

 

Cuando lo leí, me sentí muy identificada. Mi visión a los 18 años de lo que quería en la vida era una visión inexperta. Seguí el camino que creí que debía seguir, hice lo que se esperaba de mí, fui disciplinada, obediente y estándar… pero llegó un momento en el que me di cuenta de que debía empezar a profundizar dentro de mí y ser realmente yo, no lo que otros esperaban de mí. Ese momento cambió muchas cosas. Creo que era imposible que pudiera saber antes lo que quería.

Pero no hablemos sólo de mí. ¿Qué le sucede a la mayoría de la gente? ¿Saben pronto lo que quieren? ¿Acertaron al decidir cuál era el la vida y el trabajo de sus sueños?

Según el estudio realizado por Gallup “State of the Global Workplace”, el 85% de los trabajadores en todo el mundo admite, cuando se les pregunta anónimamente, que su trabajo no les satisface y no se sienten comprometidos ni identificados con el mismo.

Muchas personas en el mundo odian su trabajo y especialmente a su jefe”, dice el informe.

La información coincide con lo señalado por Raquel López sobre la gente que ve en consulta que externamente tienen el trabajo de sus sueños y, sin embargo, no son felices. Existe un gran nivel de insatisfacción, a nivel profesional y a nivel personal. 

Lo que me sorprende es que no haya más late bloomers. Probablemente cuesta superar la presión social de hacer lo que se supone que debes hacer …  y en el momento en que lo debes hacer. A mucha gente le condiciona el qué pensarán los demás y viven más pendientes de la imagen externa que de lo que realmente sienten por dentro. Esa presión social hace que muchas personas no se atrevan a intentar lograr lo que desean… porque sienten que escapa a los patrones aceptados socialmente o que “es tarde”. 

¿Descubrir tu verdadera vocación a los 40 es tarde?

¿Crear tu propio proyecto a los 50 es tarde?

¿Enamorarte a los 60 es tarde?

¿Quién decide cuándo es tarde?

 

 

En la vida vas a tener lo que construyas

Yo estoy lista para el siguiente ‘round‘ de la vida.

Un nuevo principio arranca este mes de septiembre… para lograr lo que deseas.

Y es importante recordar que en la vida no vas a tener lo que quieras. Vas a tener lo que construyas.

Así que será cuestión de tener claro qué quieres y empezar a construir. Mirar siempre hacia adelante y hacerlo con amor.

Es momento de brindar por un nuevo principio y por los valientes que se atreven a iniciarlo, que no creen que sea tarde. Porque mientras haya vida, siempre volverá septiembre. Porque mientras tengas vida, siempre podrás volver a empezar … y la experiencia te hace más inteligente y multiplica las posibilidades de conseguir lo que mereces.

Feliz inicio.

 

Hoy una de mis canciones favoritas, de mi play-list vital, de esas que te llenan de energía y te hacen bailar casi sin querer, para darte las gracias por leerme y desearte un feliz septiembre.

 

September

en mi versión favorita… bailando

 

Link: September 

 

en versión original de Earth, Wind & Fire 

 

 

o para bailar con coreografía incluida  😉 

 

 

 

#loveSeptember

 

 

 

.

 

 

.