En un mundo con más de 7.500 millones de personas, es curioso cómo la vida traza una serie de redes a tu alrededor. Por algún motivo, la vida te conecta a unas determinadas personas, te acerca a gente especial, a una persona que te enlaza con otra, coincides con alguien y descubres que empezasteis trabajando en la misma organización, hablas con alguien por primera vez y resulta que tenéis más conexiones de lo que podía parecer a priori, conexiones que puedes pensar que son casualidad… o no.
Siempre he estado convencida de que, a pesar de lo enorme que puede llegar a ser el mundo, la vida te va situando en una serie de redes, pequeños hábitats en los que debías estar por algún motivo y tu mundo termina siendo un entorno muy acotado, relativamente pequeño.

Esta semana he trabajado en Madrid y en Palma de Mallorca. Algo especial me une a Mallorca, y debo decir que es una maravilla trabajar allí, en un entorno precioso, con personas muy amables… aunque debo reconocer que siempre resulta un poco extraño convivir en el hotel con una inmensa mayoría de personas que están de vacaciones, con un ritmo en su día a día muy distinto al mío, que a la hora de cenar están empezando la noche, cuando yo ya pienso en irme a dormir porque al día siguiente madrugo… pero tiene su punto.
He trabajado con un grupo de personas extraordinario, en uno de los grupos hoteleros más importantes, que cuidan la experiencia cliente con mimo y que están firmemente comprometidos con los Objetivos de Desarrollo Sostenible… un lujo estar con ellos para fomentar la agilidad y trabajar nuevas vías de innovación, proyectos en los que es un honor participar. Una nueva red de conexiones que me acerca más a Mallorca.

Mañana vuelta a casa. Y ahora, en un hueco que queda en mi agenda, aprovecho para escribir en el hotel, rodeada de gente en bañador… y me viene a la mente mi red de conexión de los domingos.

Cuando voy a escribir, siempre pienso en vosotr@s y me preocupa que se me terminen los temas sobre los que escribir, me preocupa que escribo sin demasiado tiempo para revisar… y todo ello genera unacierta presión en mí.
Y hoy escribo sobre redes, pensando en Silvia, y en ese café que tenemos pendiente y que me apetece tanto… supongo que es mucha casualidad subir al AVE y que estés en el mismo vagón –vagón silencio, por cierto– que mi amigo virtual Xavier, y que podamos tomar un café charlando sin haberlo planificado en absoluto, y que terminemos hablando de Silvia… ¡qué pequeño es nuestro mundo!

REDES

Conexiones curiosas que crea el hecho de escribir, y que te acerca a lector@s con l@s que tienes mucho en común.
Aunque todavía puede ser más curiosa la conexión que creó alguien que entró en mi cuenta de Instagram, y le gustó tanto lo que vio que no paró de escribirme hasta que consiguió hablar conmigo, largas conversaciones durante semanas con las que logró que quedáramos un día para conocernos… y resulta que¡tenemos tanto en común!
Él llegó a mi vida para acompañarme en algunas aventuras, y para abrirme los ojos a muchos temas de Innovación a los que yo no había prestado atención y marcó de forma importante algunos de mis proyectos.

Mi red de «ex arturitos» con quiénes siempre tenemos mucho más en común de lo que puede parecer a simple vista… ahí tengo una red enorme, a la que me encanta pertenecer.
Mi red amigas maravillosas que tuvo en su día su sede en Linares… si, suena sorprendente, ir a coincidir con un grupo de mujeres a las que adoro a más de 800 km de distancia de mi casa, gracias a Yolanda por hacer la magia de crear ese grupo de mujeres tan increíble y por poner a Adriana en mi vida.
Mi red familiar, esa red imprescindible, que siempre está ahí…  esa que no elegimos, que encontramos y que resulta que son de lo más grande de tu vida.

Y podría seguir… ¿cuántas redes se van tejiendo alrededor de ti? ¿En cuántas redes te encuentras inmers@ a lo largo de tu vida? Seguro que te vienen muchas a la mente. Algunas son de pura lógica, pero otras son curiosas coincidencias que no sabes muy bien por qué aparecieron…
Esas redes que se van tejiendo en tu vida son necesarias, porque te acercan a otras personas, algo imprescindible.

SOLEDAD

Una epidemia a combatir: la soledad

Recientemente el Foro Económico Mundial ha puesto el foco en la importancia de combatir la soledad de las personas, algo que califica de nueva epidemia a nivel global.
Tal y como publica en su web, según un estudio realizado por la Universidad Brigham Young en Utah:

«Las dos grandes amenazas para la supervivencia de las personas son la soledad y el aislamiento social. Y es que dos metaanálisis revelaron que la soledad y el aislamiento social pueden aumentar el riesgo de muerte prematura hasta en un 50%. El primer metanálisis incluyó a más de 300.000 adultos en 148 estudios, mientras que el segundo incluyó 70 estudios con más de 3,4 millones de adultos.
Según explica Julianne Holt-Lunstad, líder del trabajo, hay evidencia sólida de que el aislamiento social y la soledad aumentan significativamente el riesgo de mortalidad prematura y la magnitud del riesgo supera la de muchos indicadores de salud líderes».

El WEF ha compartido este vídeo para concienciar de la importancia que tiene combatir la epidemia de la soledad:«Una epidemia de soledad».

Ya lo he comentado en INED21 en otras ocasiones, la calidad de tu vida depende en gran parte de la calidad de tus relaciones.
Uno de los estudios más extensos que se han desarrollado sobre felicidad, Universidad de Harvard, que lleva muchos años en proceso y cuyo director actual del estudio –el cuarto desde su inicio– es el psiquiatra estadounidense Robert Waldinger, concluye con unos resultados curiosos sobre qué nos hace felices, y no tienen mucho que ver con riqueza, fama o trabajo, el mensaje más claro del estudio es que las relaciones de calidad nos hacen más felices y hacen más saludable nuestra vida. El estudio destaca especialmente que:

Las conexiones sociales nos hacen bien, y la soledad mata. Las personas con más vínculos sociales –familia, amigos, comunidad,…– son más felices, más sanos y viven más años.
que importante no es el número de amig@s que tengas, o de si tienes una relación o no… lo importante es la calidad de tus relaciones más cercanas. Vivir en medio del conflicto es realmente perjudicial para la salud, por lo que señala como ejemplo que vivir en un matrimonio conflictivo puede ser mucho peor que un divorcio. Tener relaciones sanas da protección.

En la misma línea de lo que indica el WEF, la soledad es una epidemia a combatir.  Esas redes que aparecen en tu vida hacen tu vida mejor y más saludable.

ENTRA EN MI VIDA

Ya ves, es cuestión de crear redes…

de dejar entrar a más personas en tu vida

personas que te hacen crecer

y que hacen tu vida más bonita…

gracias a todas las personas que estáis en mis redes

por estar ahí…

no sería yo sin vosotr@s

«Entra en mi vida»: canción preciosa, aunque debo reconocer que no tengo yo el mérito de haberla encontrado, sino que alguien especial me la envió vía WhatsApp –me encantó-… y que me parece un broche final perfecto para el tema de redes… simplemente, entra en mi vida.

Entra en mi vida…

te abro la puerta…

Artículo publicado en INED21