En los últimos días, los astros se han conjugado para hacer llegar a mis manos varias reflexiones alrededor del talento… y,  sinceramente,  creo que todas confluyen.
En un momento en el que diversos informes internacionales señalan que hemos entrado en una era de escasez de talento, es lógico preguntarse cómo podemos encontrarlo.
El mundo está cambiando, no podemos obviarlo. Hemos entrado en un nuevo entorno de conexión entre las personas, donde es más fácil encontrar lo que buscas, aprender lo que te interesa… y, a la vez, te permite exponer tu trabajo, tus valores y tus objetivos ante millones de personas… si, aunque te encuentres en el lugar más insignificante del planeta tierra.
Y en este nuevo entorno de hiperconexión, se busca talento. ¿Dónde están las personas con talento? ¿Buscamos a un grupo determinado de personas que poseen un don especial?  Pues resulta que no… No hay genios, el talento se aprende. Así lo explica el filósofo José Antonio Marina:

No hay genios, el talento se aprende.
No hay talentos innatos, hay capacidades innatas
y esas capacidades se desarrollan o no se desarrollan

Soy una firme convencida de que podemos vivir para crecer, en todo el sentido de la palabra. Crecer es una opción. Atrévete a crecer en aquello que te gusta y te motiva. El mundo busca talento y el talento está dentro de ti. Porque querer algo no basta para conseguirlo… pero es el primer paso. Podemos desarrollar nuestro talento, como expone Juan Carlos Cubeiro de forma magistral en su artículo en Human Age Institute:

O disfrutamos de la curiosidad, de la observación, de la reflexión, del aprendizaje, recubriendo con mielina nuestras conexiones neuronales, o “podamos” las sinapsis por falta de uso.
Es una decisión propia, personal, cotidiana: la de invertir (tiempo y esfuerzo) en desarrollar nuestro talento, o despreciarlo por falta de interés.

Por el mero hecho de desear algo no se va a hacer realidad, lo sabemos… pero si te lo planteas como un objetivo y empiezas a trabajar en ello,  será más fácil conseguirlo. Ello requiere constancia, esfuerzo, horas … ¿te suenan las famosas 10.000 horas?  Claro,  las que necesitas para ser un experto en un tema…. y luego necesitarás algunas más para seguir creciendo. Hablar de sueños, para mi, no es hablar de imposibles… sino hablar de metas. Ya sabes, creo que soñar es una forma de planificar.
Y, por favor, no dejes que nadie prejuzgue este planteamiento, diciendo que son solo frases naïf… está científicamente demostrado que el cerebro es plástico. Los argumentos planteados aquí a favor de desarrollar tu talento están formulados en base a estudios científicamente contrastados.
Por eso, no dudes en soñar… deja que tus sueños dominen tu pensamiento, planifica a dónde quieres llegar… así desarrollarás tu talento. Los sueños son el estímulo necesario para hacer salir lo mejor de ti. Nada es fácil y la motivación es imprescindible.
Porque la vida te pone obstáculos… pero los límites te los pones tú

 
Hasta que tu sueño domine tu mente…
nunca despertarás tu grandeza
Robin Sharma