Sal a bailar

La química del cerebro – 2

 

 

Estar bien no solo depende de factores externos.

Tú también puedes poner de tu parte para estar bien por dentro.

Te lo comentaba en mi anterior artículo, tú puedes activar la química de tu cerebro para sentirte bien, para estar mejor. Y si la semana pasada fue la oxitocina con los abrazos, esta semana le toca el turno a las endorfinas. Si, ya sé que parece difícil superar lo bien que te sientes con un abrazo sincero, largo, intenso y consciente… pero espera a ver lo que las endorfinas pueden hacer contigo.

 

Las endorfinas

Las endorfinas son péptidos opioides endógenos que funcionan como neurotransmisores. Son producidas en el cerebro por el hipotálamo y la glándula hipófisis. Sus efectos son similares a los opiáceos sintéticos.

De hecho, su estructura química es muy parecida a la morfina. Tienen una acción como analgésico y producen sensación de bienestar e incluso de euforia. Las endorfinas son capaces de inhibir las fibras nerviosas que transmiten el dolor, además de actuar a nivel cerebral produciendo experiencias subjetivas, como mejorar el estado de ánimo, un efecto antidepresivo y otras acciones conocidas por los deportistas, como son la disminución de la ansiedad y la sensación de bienestar, además de la analgesia y sedación antes mencionada.

Activar las endorfinas implica generar ese efecto calmante en tu cuerpo, de un modo natural y sin contraindicaciones. Son muchos los efectos beneficiosos de estimular las endorfinas:

  • Promueven la calma.
  • Crean un estado de bienestar.
  • Mejoran el humor.
  • Reducen el dolor.
  • Retrasan el proceso de envejecimiento.
  • Potencian las funciones del sistema inmunitario.
  • Reducen la presión sanguínea.
  • Contrarrestan los niveles elevados de adrenalina asociados a la ansiedad.

 

Cómo puedes estimular las endorfinas

Tú contribuyes a generar más endorfinas cuando te ríes, cuando practicas tu hobbie, cuando escuchas música, cuando cantas, cuando corres o cuando bailas. Está demostrado que la risa y la actividad física intensa ayudan a aumentar los niveles de endorfinas de un modo sano.

También se puede conseguir un incremento de endorfinas a través de la alimentación. Si comes alimentos ricos en proteínas, como carne, huevos, pollo, pavo, pescado, o también ginseng, o, por supuesto, el cacao (¿qué tendrá el chocolate que ayuda siempre a sentirte mejor? Aunque esta opción a mí no me sirve porque soy de ese grupo minoritario de personas a las que no nos gusta el chocolate). En este enlace encontrarás mayor detalle sobre alimentos que liberan endorfinas.

 

Tú eliges con qué opción te quedas para liberar endorfinas.

Mi elección la tengo clarísima, me quedo con bailar.

 

Sal a bailar

Fragmento de mi post “Deberíamos bailar más

 

Deberíamos bailar más.

Siempre me ha gustado la música. De todo tipo: pop, melódica, clásica, rock, reagge, … creo que cada tipo de música tiene su momento. En el coche, haciendo gym, conciertos, ratitos de descanso, momentos de nostalgia, escapadas, cena romántica, …. Siempre habrá canciones para esos momentos. Canciones que son vida, música que es capaz de transmitir lo que las palabras no pueden. Cada etapa de tu vida tiene su banda sonora, y una canción es capaz de transportarte de forma mágica a otro momento.

Y muchas de esas canciones invitan a bailar. Es algo involuntario, instintivo. inconsciente… sin saber por qué, empiezas a mover los hombros, o las piernas, o la cabeza,… al ritmo de la música que suena. Algo te impulsa a bailar. Y bailas, normalmente si no hay nadie a tu alrededor, porque un cierto pudor o vergüenza te frena si hay gente cerca, ¿verdad? Sentimos una cierta presión del entorno. Nos da reparo bailar. Temor a hacer el ridículo.

Sin embargo, deberíamos bailar más.

«Si quieres mantenerte joven, con salud y feliz, baila».

Así lo afirma la doctora en Neurobiología Lucy Vincent.

Le gusta bailar y como neuróloga ha investigado los beneficios de esta práctica.

 

Efectos positivos de bailar

Coordinar movimientos al ritmo de la música y coordinarse con otros estimula las conexiones cerebrales y tiene efectos sobre nuestro cuerpo, sobre la creatividad, sobre el sistema inmunitario, …

La Dra. Vincent nos cuenta en su libro «¡Haz bailar a tu cerebro!» que el baile produce una multitud de efectos positivos en nuestro cuerpo y en nuestro cerebro. Es interesantísimo descubrir lo que bailar te puede aportar, estos son algunos de esos efectos positivos:

 

Estimula el cerebro porque para bailar debes coordinar diferentes áreas: la que planifica el movimiento, las que se encargan de la posición espacial y de recordar acciones anteriores, la que envía instrucciones a los músculos y las que nos mantienen en equilibrio y permiten sincronizar el movimiento

Es bueno para la salud, es una actividad aeróbica y puede ser buena para la salud cardiovascular. Como señalan algunas investigaciones, el ejercicio que conlleva la danza podría contribuir a reducir el riesgo de desarrollar enfermedades como hipertensión, diabetes, depresión y obesidad.

Bailar nos pone de buen humor. El movimiento físico libera endorfinas en nuestro cerebro, produce sensación de bienestar y tiene también un efecto antidepresivo.

Reduce el estrés y la ansiedad.

El baile nos hace empatizar. Cuando estamos con alguien con quien estamos a gusto, imitamos sus movimientos de forma inconsciente, y al bailar lo hacemos especialmente: la coordinación es básica.

Es una actividad socializadora. El baile puede ayudar a construir nuevas relaciones interpersonales, y contribuye a mejorar tus habilidades sociales

Ayuda a aumentar la confianza en ti mism@.

Bailar potencia la creatividad. La creatividad es la capacidad de unir diferentes capacidades y generar nuevas redes neuronales, y eso es precisamente lo que hace el aprendizaje de un baile.

Te hace quemar grasa, por lo cual es recomendable para mantenerte en buena forma física.

Ayuda a trabajar los músculos y el sistema nervioso.

Ralentiza el envejecimiento porque requiere de un aprendizaje y de una atención constantes. Bailar te exige aprender, adaptarte al otro, seguir el ritmo y mantener una atención constante.

Tiene beneficios en la salud para prevenir la demencia. Es una actividad beneficiosa para personas con enfermedades degenerativas y cognitivas. Diversos expertos médicos señalan que «bailando se trabaja con los pacientes la coordinación y el equilibrio. Diversos estudios señalan cómo ayuda en la enfermedad de Parkinson, y otras afecciones neurológicas, como la demencia y el Alzheimer».

 

Cinco veces por semana

Como indica Lucy Vincent en la entrevista de La Contra de La Vanguardia «deberíamos bailar cinco veces por semana, aunque con una o dos veces ya se notan los efectos».

Yo lo he puesto en práctica y a mí me sienta extraordinariamente bien, probablemente será también porque me encanta bailar. Hablo con muchas personas a las que les gusta bailar, pero me dicen que ahora bailan menos “porque con el covid hay menos fiestas … ” y yo pienso que realmente no hace falta una excusa para bailar, no hace falta ir a una fiesta, porque se puede bailar en casa, porque la fiesta puede ser donde estés tú.

Si te apetece… sal a bailar

no necesitas mucho para bailar,

si quieres mantenerte joven,

con salud y feliz… baila

 

 

Tacones rojos

Y si hay una canción que he bailado últimamente… es esta.

Me tiene enganchadísima desde hace semanas, me encantó nada más oírla, espero que te guste también a ti…

 

 

Hay un rayo de luz

que entró por mi ventana

y me ha devuelto las ganas

me quita el dolor…

 

 

 

 

Fuentes:

  • Endorfinas: Las llamadas Hormonas de la Felicidad. Clínica Ciudad del Mar