Semana intensa.
Mi libro «Crea tu propia empresa» salió a la venta el miércoles de esta semana y en estos poquitos días ya me ha dado las primeras alegrías… los primeros lectores, las primeras entrevistas sobre el libro -que compartiré próximamente- o la maravillosa reseña del libro que escribió mi admirado Juan Carlos Cubeiro ayer en su blog «Hablemos de talento«, que lo resume de forma clara, precisa y optimista -que solo puedo agradecer muy sinceramente y que, por supuesto, voy a compartir también en el blog-.
Un fin de semana preparando mis temas para la próxima semana, que me llevará a dar sesiones de formación para profesores sobre la habilidad emprendedora, sesiones de tutoría de alumnos que desarrollan su propio proyecto emprendedor en ESADE y una conferencia para padres y madres sobre el talento emprendedor de nuestr@s hij@s. Un trabajo maravilloso que da sentido a mi día a día.
No es casualidad que prepare todo este trabajo sin dejar de pensar en Pau y Ares ni un solo momento. Si algo ha marcado mi vida y me ha hecho descubrir qué es lo que había venido a hacer aquí… han sido ellos, sin duda.
Y es que hay personas que tienen el poder de cambiar nuestro mundo.
Piénsalo por un momento… ¿quién cambia tu mundo?
Sabes que es verdad… alguien cambia tu mundo, al igual que tú cambias el mundo de otras personas.
Estoy convencida de que si te preguntan quién cambia tu mundo vas a tener una respuesta muy clara. En mi caso, sin ninguna duda, mis hijos Pau y Ares han cambiado mi mundo. Desde el día en que nacieron y cada día de su vida…
Es curioso cómo cambiaron mi perspectiva sobre el mundo, como me hicieron ver la importancia de la educación, como cuando algo les ha preocupado, he sentido la necesidad de escribir sobre ello y se ha acabado convirtiendo en un artículo muy leído, como he aprendido de Pau que la voluntad puede hacer cambiar los hábitos de una persona, o como Ares ha inspirado algunos de los casos reales de actitud emprendedora que explico en mis sesiones y que arranca más sonrisas entre los asistentes… Nuestra vida está marcada por nuestro entorno y la mía está marcada por ellos.
Nuestr@s hij@s cambian nuestro mundo de una manera extraordinaria y es por ello que siento que estamos en deuda con ell@s y que también nosotros debemos esforzarnos por cambiar lo que no funciona bien. El amor es una fuerza tremendamente poderosa que nos mueve a cambiar el mundo.
Quiero cambiar el mundo.
No me digas que no lo has pensado nunca. Es una lícita aspiración… especialmente cuando sabes ver aquello que no funciona como debería e intuyes por dónde podría ir la solución.
En mi caso, creo que puedo aportar mi pequeño grano de arena para promover la habilidad emprendedora, una habilidad que nos lleva a las personas a convertir las ideas en realidad, a adoptar una actitud proactiva ante los retos que nos surgen día a día, para buscar soluciones y para alcanzar nuestras metas. Es una habilidad que está relacionada con la creatividad, la innovación y la asunción de riesgos, así como con la capacidad de planificar y gestionar proyectos con el fin de alcanzar objetivos.
Emprender para cambiar el mundo.
Nacemos con actitud emprendedora, se trata de no apagarla. Y este es un reto enorme, al que debemos aspirar. Los niños son emprendedores por naturaleza, se atreven a intentar cualquier cosa.
¿Cuándo hemos dejado de ser emprendedores? ¿Cuándo dejamos de confiar en que somos capaces de hacer realidad nuestras ideas? En este mundo, la habilidad emprendedora ha pasado a ser más necesaria que nunca y creo en la importancia de ayudar a desarrollarla y a entrenarla. Ayudar a las personas a tener más iniciativa en su vida personal -colaborando con el mundo educativo a entrenar la habilidad emprendedora- y contribuir a que más personas se atrevan a impulsar nuevos proyectos en su vida profesional -con la formación a emprendedores o con mi libro «Crea tu propia empresa»- son mis humildes aportaciones para cambiar el mundo, porque creo que debemos afrontar el futuro con mirada emprendedora.
Solo queda felicitar a Ashoka por esta campaña tan inspiradora, por su trabajo en favor del emprendimiento social y por hacernos notar que siempre hay alguien que cambia nuestro mundo. Todos podemos cambiar el mundo, es necesario ser conscientes de ello y trabajar para hacerlo, que siempre pasará por emprender… como dice Guy Kawasaki:
si tu objetivo es cambiar el mundo,
emprender consiste en hacer
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