PULSA PAUSA
El descanso es parte del proceso de trabajo
Tras una semana de trabajo en la que ya va terminando el curso en la universidad, preparando nuevos temas y continuando con los proyectos en marcha, llega un viernes especial.
La noche de San Juan marca un cambio importante en el calendario.
Da igual si celebras la noche de San Juan, el solsticio de verano o el inicio de las vacaciones. La noche y madrugada del día 23 es perfecta para buscar la excusa perfecta para perderte ante una hoguera o frente al mar. Para mi la combinación perfecta son las estrellas, un poco de música y una copa para celebrar la noche más corta del año.
En esta época, se nota ya que el cuerpo necesita un descanso.
Sé que, tal vez, no soy la persona más adecuada para recordar la necesidad del descanso, porque soy consciente de lo mucho que me cuesta parar. Aunque, tal vez, por ello, necesito este recordatorio todos los años cuando llega el mes de junio:
PULSA PAUSA
Y me lo digo a mí misma, al igual que te lo recomiendo a ti.
El descanso es parte del proceso de trabajo
La evidencia nos muestra que no podemos rendir al 100% el 100% del tiempo. Es físicamente imposible. Por ello, a la hora de gestionar el tiempo, sabemos que el descanso debe tener su espacio en nuestra agenda. Es necesario descansar, no solo en vacaciones, sino también durante tus jornadas de trabajo.
Es bueno aplicar técnicas como la técnica ‘pomodoro’, una técnica que consiste en dividir el trabajo en bloques y alternar un bloque de trabajo (largo, de 45 ó 60 minutos) con un breve bloque de descanso (de 5 ó 10 minutos). Esos 5-10 minutos de descanso entre bloques no son tiempo perdido, sino que son un modo de optimizar tu rendimiento.
El descanso es parte del proceso de trabajo
Es necesario parar para poder hacer mejor las cosas, para trabajar mejor y para conseguir mejores resultados.
Consejos para tomar tiempo de descanso
Es necesario incluir tiempo de descanso en tu rutina diaria. Tú debes decidir el mejor modo de organizarlo, porque tú sabes cómo es tu día a día, qué es lo que puedes hacer y qué es lo que te sienta mejor.
Te dejo 5 posibilidades de descanso en tu día a día, por si te sirven de inspiración para organizarte mejor y para que escojas aquellas que mejor se pueden adaptar a ti.
1.
Establece pausas regulares
Programa breves descansos a lo largo del día para desconectar y recargar energías. Puedes hacerlo cada 60-90 minutos, por ejemplo.
2.
Levántate y muévete
Aprovecha tus descansos para estirarte, dar un paseo corto o hacer algunos ejercicios ligeros. El movimiento ayuda a liberar tensiones y revitalizar el cuerpo.
3.
Respira.
Practica la respiración consciente en alguna de esas pausas. Dedica unos minutos a practicar ejercicios de respiración profunda. Inhala lentamente por la nariz, mantén el aire unos segundos y exhala suavemente. Esto ayuda a relajarte y a calmar la mente.
4.
Realiza alguna pausa un poco más larga.
Puedes aprovechar para hacer algo que te ayude a recuperar energías. Tomarte un café o comer una fruta. Esto te brindará un momento agradable y revitalizante.
O, si estás en la oficina, puedes aprovechar para realizar una pausa café y socializar con tus colegas de trabajo: Aprovecha el tiempo de descanso para charlar con tus colegas. Compartir un momento ameno y distendido puede ayudarte a relajarte y cuidar las relaciones.
5.
Desconéctate de las pantallas.
Durante tus descansos, evita el uso de dispositivos electrónicos. En lugar de eso, sal al aire libre, mira por la ventana o simplemente cierra los ojos y descansa. Desconectarte de las pantallas incentiva una verdadera relajación.
Recuerda que estos son solo ejemplos y que puedes adaptarlos a tus preferencias y a tus posibilidades. Lo importante es encontrar actividades que te permitan hacer mini-pausas, descansar y renovar tu energía para volver al trabajo con mayor foco.
Mi consejo es que no esperes a que el cansancio te supere. Unas pequeñas rutinas de descanso en tu día a día pueden ser la clave para evitar llegar al agotamiento.
Es importante establecer límites, respetar el tiempo de descanso personal y cuidarte.
Ponlo en práctica
La teoría está clara: el descanso es necesario. Las pausas forman parte del proceso de trabajo.
Aunque llevarlo a la práctica, a veces, nos cueste un poquito.
Para estar a tu mejor nivel, las pausas son fundamentales.
Y es que cuando estamos cansados -física o mentalmente- conservamos nuestras habilidades, pero están a otro nivel. Por supuesto, seguimos sabiendo hacer las cosas, pero no nos salen igual. El descanso te ayuda a conseguir mejores resultados. No lo dudes.
Pulsa pausa.
Desconecta.
Y verás como todo sale mejor….
Feliz inicio de verano.
Hoy, una canción para bailar, la última de Aitana, para darte las gracias por leerme, deseo que hayas tenido una maravillosa verbena de San Juan y que disfrutes del fin de semana
.
.
Comentarios recientes