Activa la química de tu cerebro

 

Somos química.

 

Días de nostalgia. Determinadas fechas duelen. Quienes hemos perdido a una persona querida, es inevitable extrañar… días en los que toca aceptar el dolor y sobrellevarlo dando gracias a la vida por haberla tenido.

Fin de semana de tres días, con su parte positiva: nos deja un poquito más de tiempo para compartir con las personas importantes de nuestra vida… tiempo de tranquilidad, de relax, de música y de conversaciones.

Las conversaciones construyen una parte de nuestras vidas. Y en una de las conversaciones de este fin de semana, surgió justamente el tema de la química, hablando del enorme impacto que tiene la química en nuestro cuerpo y en nuestra manera de sentirnos. La función del cerebro es controlar todo lo que sucede en nuestro cuerpo y, en esa función, la química tiene un papel fundamental.  

 

El funcionamiento del cerebro

El funcionamiento del cerebro humano era un área desconocida hasta hace poco, pero el avance de los últimos años nos ha permitido conocer mucho sobre él. Los neurocientíficos nos han mostrado que se producen unas 100.000 reacciones químicas en el cerebro humano cada segundo.

Hoy sabemos que el cerebro es un transmisor que emite señales que pueden ser medidas y que utiliza diversas sustancias químicas para gestionar lo que nos pasa por dentro.

La química cerebral nos predispone hacia determinados estados de ánimo. Cualquier alteración puede hacernos experimentar la más elevada felicidad o la más insoportable tristeza.

Conocemos también que podemos estimular las sustancias químicas de nuestro cerebro de forma natural.

Y resulta curioso conocer cómo activas esa química con determinadas actividades.

 

Activas la química de tu cerebro con…

 

Una buena conversación

Nada más estimulante que una buena conversación.

Una buena conversación estimula de un modo importantísimo tu cerebro

Así lo afirma un premio Nobel de Química, el bioquímico Abraham Hershko.

Existen pocas cosas en la vida que pueden hacernos sentir bien, y una de ellas es una conversación profunda, que se produce cuando sientes que te escuchan y se crea una conexión real, para compartir conocimientos, experiencias, sentimientos, opiniones, …

Una conversación sincera, sugerente y profunda entre dos personas tiene un enorme impacto en los mecanismos neuronales. Sin darte cuenta, con cada información recibida por tu cerebro, se enciende el motor de la empatía y se activan los circuitos de la dopamina y serotonina para regalarte una agradable sensación de bienestar y motivación.

 

Un beso

También activas la química de tu cerebro con un beso.

¿Para qué sirven los besos? 

Los besos tienen su utilidad y sus efectos. Nos lo cuenta este artículo sobre ‘el efecto que un beso tiene en tu cerebro’.

Un estudio de la Universidad de Albany –Nueva York– publicado en Evolutionary Psychology, apuntaba que el primer beso es clave para que una persona decida si continuar o no la relación. El primer beso actúa como una especie de filtro, como un mecanismo en el subconsciente que detecta si hay alguna incompatibilidad de tipo genético, señalan los investigadores. Así que el hecho de besar bien o mal tiene su impacto, porque hacerlo mal puede hacer fracasar una relación incipiente, lo demuestran los datos: el 58% de los hombres y el 66% de las mujeres encuestados en ese trabajo admitieron que después de un primer mal beso pusieron fin al romance.

La saliva que se intercambia en un beso da información a nuestro cerebro, como explica el artículo. El cerebro analiza esa información sensible que recibe, y si la respuesta a ese estímulo del beso es positiva –respuesta que se obtiene en décimas de segundo– comienza a segregar una serie de neurotransmisores (sustancias químicas que comunican unas neuronas con otras) y los protagonistas del beso empiezan a notar sus efectos. Se produce entonces una serie de reacciones químicas, que van a depender del tipo de neurotransmisores que segregue, del porcentaje y del equilibrio entre ellos. Los expertos describen cuatro neurotransmisores básicos que se despiertan con el beso:

Dopamina: que nos hace sentir placer y bienestar.

Serotonina: con la que sentimos excitación y optimismo -aunque en otros casos, también puede provocar un efecto de ira y agresión-.

Epinefrina: que aumenta la frecuencia cardiaca, el tono muscular y la sudoración, por eso sentimos calor y que el corazón se acelera.

La oxitocina: que genera apego y confianza.

Ya ves, un beso dice muchas más cosas de las que imaginabas. Será por eso que recordamos perfectamente algunos besos…

 

Otras formas de activar «los químicos de la felicidad»

¿Más dopamina? La puedes activar durmiendo de 7 a 9 horas, o haciendo ejercicio físico

¿Más oxitocina? Medita

¿Más serotonina? Agradece todos los días

¿Más endorfinas? Baila

 

No somos conscientes de todo lo que la química hace con nosotros…

Esa química invisible en tu vida

que puedes activar con tus actos.

Así que, guarda tiempo para mantener conversaciones interesantes

y para hacer todo aquello que te hace sentir bien,

el tiempo que dedicas a lo que te gusta no es tiempo malgastado.

 

Activa esa química en tu cerebro…

y reconecta desde dentro de ti

(tu vida te lo agradecerá)

 

Love on the brain

Must be love on the brain..

 

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